2 Sep
2014

#Thanatos La muerte en Redes Sociales: dos reacciones para reflexionar

#Thanatos La muerte en Redes Sociales dos reacciones para reflexionarTodos lo hemos notado. Casi nadie habla de la muerte aunque sea parte de nuestras vidas. Celebramos nuestra vida en las redes sociales a diario (sobretodo en vacaciones ¿verdad?) 😉 pero ¿qué pasa cuando la muerte hace acto de presencia?

A nivel personal creo que todos o casi todos hemos tenido pérdidas más o menos cercanas y nuestra primera reacción ha sido dejar por un momento aparcada nuestra vida online para centrarnos en la offline, en encontrar el apoyo que nos ayude a superar esos momentos. Aunque me gustaría pensar que eso mismo lo podemos encontrar en nuestras comunidades online, no soy tan optimista al respecto… Sin embargo, no lo descarto del todo puesto que hemos visto como en determinados casos las Redes Sociales pueden servir como terapia y revulsivo para algunos.

Cuando nos toca de cerca y pasados esos primeros momentos de aturdimiento, debemos pensar en qué hacer con los perfiles de esa persona en caso de que los tuviera. Existen muchas herramientas, incluso las propias redes sociales han pensado en ello, ofreciéndonos alternativas. En este post me voy a centrar en otro aspecto, pero por si acaso, os dejo el post de Vanessa Gregori en donde están muy bien explicados los pasos a seguir si os encontráis en esa situación: Las redes sociales después de la muerte ¿Tienes ya tu testamento digital?.

Pero ¿qué pasa cuando la muerte no nos toca de cerca?  Todos hemos visto como cualquier fallecimiento de un actor/cantante/famoso se posiciona como Trending Topic en pocos minutos ya que muchas personas alrededor del mundo quieren dejar su comentario “homenaje” aunque no lo hubieran conocido. ¿Siempre?

Lamentablemente no, y de eso quiero hablaros. Recientemente han habido dos fallecimientos que han provocado reacciones muy diversas entre las comunidades online, reacciones que deberían hacernos analizar nuestro uso de las Redes Sociales.

1 – La ejecución del periodista James Foley  en Siria.

Abrimos Internet  y nos encontramos con la terrible noticia de que el periodista americano, secuestrado durante dos años, ha sido ejecutado delante de la cámara en Siria. Desgraciadamente no es el primero ni será el último periodista que corra esa suerte, y el hecho de que ahora se investigue si realmente la ejecución fue posterior al vídeo o no no afecta en lo más mínimo.
¿En qué momento se ha convertido en “normal” que tanto el vídeo de la ejecución como fotos sacadas del mismo se conviertan en virales en pocas horas?. Si bien es cierto que con internet es mucho más difícil esconder y manipular según qué informaciones (otra cosa es que los medios quieran publicarlo o no), también debemos ser conscientes de lo que conlleva estar compartiendo esta foto o este vídeo por puro morbo. Porque no nos engañemos… ¿el objetivo real detrás de ese tuit, post, etc? ¿Informar? Podemos compartir perfectamente la noticia sin compartir esas imágenes ¿verdad? Ya hablé de ello en mi post sobre la desgracia del  #MadridArena. Y sí, meto en el mismo saco a los medios online. De nada sirve compartirlo a diestro y siniestro para luego prohibirlo.  Deberían analizar las consecuencias antes de que las prisas por ser los primeros en informar pueda con la ética profesional.

La única reacción positiva de todo eso (que es la que debería haber sido desde el principio) la encontramos en  amigos y compañeros del periodista que inundaron las Redes Sociales de fotos celebrando su trabajo. ¿Os imagináis esa familia viendo una y otra vez las imágenes de su ser querido antes de ser ejecutado? Y sí, nos queda lejos, pero Internet es global, no existen fronteras, así que no apoyemos según qué conductas dándoles difusión. Pensemos antes de dar a RT o compartirlo.

2 – El suicidio del actor Robin Williams

En este caso añadimos un factor más al tratarse de un suicidio, por lo que debemos medir aún más nuestras palabras en tanto en cuanto puede haber muchas personas en la misma situación que nos estén leyendo. Que Robin Williams haya sido Trending Topic es fácilmente comprensible como hemos comentado antes.  Millones de usuarios en todo el mundo hemos disfrutado con su trabajo, dejándonos momentos memorables que nos han acompañado mientras nos hacíamos mayores (esa subida de pupitres en “El club de los poetas muertos” es la primera imagen que me vino a la cabeza cuando me enteré… ¿a cuántos de vosotros os pasó también?) 🙂

Lo que ya no es tan comprensible es que bombardeen a la propia hija del actor con mensajes vejatorios e imágenes photoshopeadas supuestamente de su padre, haciendo que  decida abandonar Twitter e Instagram.  ¿Qué nos pasa para actuar así? ¿Es que el percibido anonimato hace que salga nuestro peor yo? Es otro tipo de Bullying, pero lo es, no nos llevemos a engaño.(De esto podríamos también hablar mucho, pero en otros foros) Por no hablar de que el día después de su muerte, su Twitter amaneció con medio millón de seguidores más. ¿Por qué nos ponemos a seguir una cuenta de un fallecido?

Y ¡ojo! No todos estamos capacitados para hablar de depresión o de personalidad suicida en nuestros posts. Si lo vamos a hacer dejemos a los profesionales que nos asesoren en ese terreno porque podemos hacer mucho daño. Es verdad que de ello se han dado cuenta algunas compañías, como Tumblr, que añadió un pequeño texto al respecto en la red, o Google que hace unos años firmaba un acuerdo en España con el Teléfono de la Esperanza para mostrar sus datos en caso de buscar determinadas palabras como “suicidio” en el buscador.

Google Suicidio - Teléfono de la esperanza

Soy consciente de que es una reflexión personal y que puede que no estéis de acuerdo conmigo (¡y que estoy dejando muchas preguntas sin respuesta!). Ya me permitiréis que de vez en cuando me salga del tono habitual para reflexionar con vosotros sobre este tipo de cosas. No sé si os pasa pero últimamente tengo la sensación de que estamos perdiendo poco a poco nuestra humanidad. ¿No os da la sensación de que cada vez vamos más a nuestro aire sin pararnos a pensar en los demás?

Por eso, para terminar, os invito a que reflexionéis sobre ello antes de enviar vuestro próximo tuit, post o correo. A ser conscientes del poder de la palabra online, a usar las herramientas con cabeza… a pensar antes de actuar. ¿Consigo algo con esa información? ¿Puedo hacer daño a alguien? ¿Y si fuera yo? ¿Me gustaría que trataran así a mi familia?

Hagamos de Internet y las Redes Sociales un sitio justo. Si estas conductas te molestan en la vida offline ¿por qué las vas a dejar  pasar online?
En nuestras manos está ¿no creéis?

@trapinapi

Imagen de Thanatos : en la Web Maicar.com

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Psicóloga orientada al Retail y Trade Marketing para distintos sectores, mayormente el farmacéutico. Últimamente en formación superior. Escribo sobre Retail, Social TV, Redes Sociales ... siempre con el marketing como nexo. Cinéfila y seriéfila 2.0 😉
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